Vista parcial de la fachada

Abstract

El edificio consistorial estructura su fachada en dos alturas en las que se sitúan tres vanos por cada una de ellas. Estos vanos aparecen enmarcados con molduras que reciben una policromía diferente a la del paño del edificio y similar a la del resto de elementos estructurales: zócalo, imposta separadora, cornisa y cuerpo de reloj. En la planta baja aparece el vano de acceso esquinado que rompe el zócalo de la fachada. Sobre este zócalo arranca la ventana rectangular que se sitúa en el eje central; en el extremo de la izquierda aparece otro vano que se abre en su parte posterior como balcón-mirador hacia el pantano del Tranco. La planta noble marca su arranque con la imposta separadora, en ella se sitúan tres grandes vanos enfilados sobre los de la planta baja, que al igual que estos reciben molduras en su embocadura y ante los que se abren sencillos balcones de forja. Subrayando la simetría del edificio y potenciando el eje central, aparece sobre la cornisa de remate de la fachada un cuerpo en el que se sitúa el reloj, elemento clave para este tipo de edificios públicos, expresión de autonomía de los distintos municipios.