Vista general del exterior de la iglesia y torre campanario

Abstract

La Iglesia parroquial Mayor de Santa María de la Asunción de Estepa se encuentra situada en el Cerro de San Cristóbal que domina la localidad, rodeada por las murallas del castillo, junto al convento de Santa Clara y al de San Francisco. Por haber sido reconquistada la villa el 15 de agosto de 1240, le pusieron la advocación de la Asunción a adaptación de la mezquita local en parroquia.

Es un edificio exento rodeado por amplios espacios con arbolado, por lo que sus volúmenes son claramente apreciables, así como todos los puntos de vista que ofrecen sus cuatro fachadas. Destacan los elevados muros que cierran las naves, así como un torreón circular cubierto por chapitel y la torre a los pies de la iglesia, ambos adosados al muro del Evangelio y un edificio octogonal aislado situado junto a los pies de la iglesia en el lado de la Epístola.

El rasgo definitorio de la Iglesia de Santa María es la irregularidad que presenta de su planta, resultado de un proceso de reconstrucción que no llegó a concluirse. En el edificio actual se distinguen dos partes bien diferenciadas, situándose la más antigua en los pies del templo con eje distinto al rest9o del edificio y difícilmente unida a la fábrica y por otro lado la nueva construcción.

En el tránsito del siglo XV al XVI se fue levantando el nuevo templo, comenzando por la cabecera, una iglesia gótica de tres naves con testero plano y cubiertas de bóvedas sexpartitas y estrelladas cuyos nervios arrancan de pilares de sección circular cubiertos de baquetones góticos.

Este edificio sustituía a otra primitiva iglesia gótica, posiblemente del siglo XIV, construida, a su vez, sobre una edificación musulmana por la Orden de Santiago a la que Alfonso X confió la custodia de la localidad. Ésta era de una sola nave con fuertes arcos transversales de perfil apuntado, de la que restan los dos primeros ámbitos comenzando por los pies de la Iglesia. La articulación de la obra nueva con la antigua es compleja no sólo por las diferencias morfológicas sino por el leve cambio de orientación del eje que se dio a la obra nueva.

El buque del templo, realizado en cantería, que se desarrolla en su eje hacia Poniente, tiene planta y alzado de salón con ábside central poligonal y laterales planos. Cuenta con tres espaciosas naves divididas en tres tramos, separadas por pilares de sección circular recorridos por baquetones góticos, en los que apoyan arcos apuntados y cubiertas por bóvedas de sexpartitas y estrelladas.

Junto a la cabecera, en el lado de la epístola, un espacio de forma aproximadamente cuadrada fue la sacristía y en la actualidad es tránsito para acceder a la nueva sacristía que se construyó en el siglo XVIII adosada a la cabecera.

En el último tramo de la nave central se sitúa el coro con la tribuna del órgano y en la zona de los pies se encuentran la que fue capilla bautismal, de planta rectangular, cerrada con reja de forja, dependencias que sirvieron de vivienda al sacristán y la torre.

Cuenta con tres portadas de acceso, la primera se encuentra situada en los pies la iglesia, , la segunda en el segundo tramo del muro del Evangelio y la tercera un acceso que se comunica con la antigua sacristía abierto en el muro de la Epístola. Carecen de importancia y de decoración las dos segundas mientras que la primera, aunque de gran sencillez, muestra un vano de medio punto rebajado enmarcado por alfiz.

Situada a los pies del edificio y unida al muro del Evangelio se encuentra la torre. Esta sustituyó a otro que se hundió el 31 de diciembre de 1887, siendo levantada con nuevo diseño entre 1894 y 1896 por Francisco Torres Ruiz, arquitecto natural de Écija, encuadrándose dentro del estilo historicista con claros aires neogóticos. Es de planta cuadrada, con basamento de piedra, caña de ladrillo subdividida por cuatro bandas horizontales con óculos de iluminación. Sobre la caña descansa un doble cornisa muy moldurada en la que se asienta el primer cuerpo en el que se sitúan las campanas. Sus cuatro frentes repiten el mismo esquema compositivo, un vano central de medio punto con decoración en la clave flanqueado por baquetones rematados en pináculo, enmarcándose el vano de medio punto por otro conopial. Los ángulos de este cuerpo de conforman mediante la unión de tres medias columnas sobre pedestal, sobre las que cabalga una cornisa muy movida en distintos planos. Sobre ella un antepecho calado con remates a modo de pináculos, de cuyo centro emerge segundo cuerpo de planta octogonal con una vano apuntado y estilizado en cada uno de sus frentes, rematado por chapitel también de sección octogonal.